Pablo y Hippie, dos trotamundos solidarios en bicicleta

Corría el año 2015 cuando Pablo Calvo decidía dejar su trabajo de bombero y tomar la decisión más arriesgada de su vida: recorrer el mundo en bicicleta junto a su inseparable perra Hippie. Comenzaba así una historia que no solo les ha servido para viajar por medio mundo y publicar un libro, sino que, también, les ha permitido involucrarse en causas sociales. Ellos son Bikecanine.

“Cuando todo va mal, la aventura comienza” este es el lema de Pablo. En el año 2010 decidió buscar unas vacaciones distintas que fueran económicas e implicasen un poco de aventura. Los 200 kilómetros que separan Gijón de Santander fueron la opción elegida. Esta primera experiencia en bicicleta le enganchó y le sirvió de aprendizaje para todas las aventuras que estaban por venir.

Pablo ha realizado desde entonces rutas por todo el mundo: ha recorrido Alaska, pasando por Norteamérica y por casi todos los países de la Europa continental (en este caso Hippie le acompañó). Incluso se atrevieron a adentrarse en el Círculo Polar Ártico.

Tras volver a casa de este helador viaje, Pablo y Anina (su pareja por aquel entonces) decidieron plasmar por escrito su historia y vivencias, redactando el libro Expedición Cabo Norte, que acaban de presentar haciendo una gira por toda España.

Este modo de vida no solo le ha servido para conocer mundo sino también para concienciar sobre causas sociales. El deseo de darle un sentido diferente a sus viajes se hizo realidad cuando decidió recaudar dinero para la investigación contra el cáncer infantil en al año 2012. La aventura terminó con un total de 3.500 € recaudados en los 2.000 kilómetros que unen Nantes (Francia) con Gijón. Después vinieron muchos más viajes y proyectos solidarios. En estos años ha recaudado a través del proyecto más de 50.000 mil euros para diferentes causas.

La otra parte de la historia la “escribe” Hippie, la mejor compañera de viaje para Pablo. Ella es una perrita adoptada que le sigue a todas partes y, además de acompañarle durante el pedaleo, le protege y defiende por las noches ante cualquier peligro. En su web https://bikecanine.com/ se pueden ver todos los vídeos de los viajes de estos dos trotamundos que han ido grabando y editando con los años.

Estos dos aventureros son nuestro #TúDecides de marzo.

Pablo, renunciar a todo para empezar este estilo de vida debió ser difícil, ¿mereció la pena?

Voy a cumplir cuatro años dentro de poco, porque para mí he tenido dos vidas: mi vida pasada “tradicional” y la vida que tengo ahora desde que decidí cambiarlo todo. En este tiempo he tenido de todo: buenos y malos momentos, crisis y éxitos, victorias y fracasos… pero hay algo por lo que nunca he pasado en estos cuatro años y es por el arrepentimiento. No ha habido un solo día en el que me haya arrepentido de esa decisión. Ha merecido totalmente la pena.

¿Cuáles son las circunstancias más difíciles para pedalear? ¿Un clima adverso? ¿Un terreno inestable? ¿La soledad?

Se habla mucho entre los ciclistas de la dureza de pedalear con el viento de cara, lluvia o frío. Pero nadie habla de pedalear cuando tienes unas ganas enormes de ir al baño. Quizás no está de más recordar que no tengo casa y cuando tengo que ir al baño: o encuentro alguno público o tengo que adentrarme en el bosque… pero no siempre es tan fácil. Hay ocasiones en las que esto no se puede hacer y se pasa realmente mal, no se lo deseo a nadie.

¿Qué criterios tiene que tener un viaje o destino para que te lances a por ello?

El primero y más importante es que tengo que poder llegar por tierra o por agua. No quiero montar a Hippie en un avión. Según el blog SrPerro.com, solamente en Barajas se habla de más de 500 mascotas desaparecidas. Yo puedo dar fe de ello: en el año 2009, volviendo de las Islas Canarias en avión con mi anterior perro, Negrito, al hacer escala en Madrid me comunicaron que lo habían perdido como si fuera una simple maleta. Pasaron horas hasta que dieron con él en el aeropuerto de Barcelona. No me gustaría tener que pasar por esa situación nunca más.

¿Qué te hace seguir pedaleando cuando las fuerzas flaquean?

La verdadera fuerza está en la cabeza, no en las piernas. He hecho retos de 500 km en 48 horas sin parar de pedalear y sin dormir con una bici de 100 kilos y los momentos más duros han sido cuando mi cabeza no quería continuar. El cuerpo es increíblemente fuerte, puede aguantar casi cualquier cosa (cada uno dentro de sus posibilidades), pero es la mente la que tenemos que entrenar y preparar para no rendirse. Además, este es un entrenamiento que no sirve para la vida diaria y para enfrentarnos a otro tipo de retos que tengamos fuera de la bici y de los viajes.

El riesgo que implica la aventura, ¿te da vértigo o te motiva aún más?

Hay riesgos que dan miedo, lo que creo que te engancha es la sensación que tienes cuando te enfrentas a ellos y los superas. Conseguir algo que es fácil no te devuelve la misma descarga de hormonas que hacer algo complicado. El problema es que con el tiempo vas buscando aventuras cada vez más extremas o en lugares remotos para tener la misma sensación que tenías al principio. Pero está bien, ¡así conoces mundo! Lo que me da más vértigo de verdad sería tener una vida plana y sin emociones.

Cuéntanos, ¿qué anécdota o aventura te hacen sonreír al recordarla ahora?

Después de tantos años viajando hay muchas aventuras divertidas que me pueden sacar una sonrisa, pero lo que tienen todas en común es que detrás hay personas. Las relaciones personales, los amigos que haces en el camino, la gente que descubres en culturas diferentes a la tuya… eso a la larga es lo que me marca y lo que hace que, cuando pasa el tiempo, saque una sonrisa al recordarlas.

Acabáis de terminar la gira de presentación de vuestro libro. ¿Cuál es vuestra siguiente aventura?

Ahora mismo estoy preparando un documental del último viaje que hice, la Épica Vuelta España, que acabaré a mediados de mayo y después la idea es iniciar un nuevo viaje hacia Oriente Medio: Turquía, Georgia, Armenia, Azerbaiyán, Irán, Omán…

Pablo, ¿con quién compartirías tu un Ponche Caballero?

Lo haría con mi amigo Guillermo, la única vez que lo probé fue con él y estaría genial recordar viejos tiempos con un viejo amigo.


Ponche Caballero es una marca fiel a su esencia desde hace más de 180 años. Siempre ha creído en sí misma, manteniendo las ideas claras, como Pablo Calvo, protagonista de esta entrevista, quien supo dar un giro a su vida lanzándose a la aventura y convirtiéndose en altavoz de causas sociales.

 

Compartir:
facebook-logo-button twitter-logo-button